Hoy quiero tocar un par de temas que para algunos pueden sonar trillados, para otros quizá novedosos y para unos terceros… tal vez no estén de acuerdo conmigo.
Qué es la virtualización?
La virtualización, desde un punto de vista de IT, es un recurso tecnológico que permite simular el contar con múltiples equipos cuando en realidad tenemos un equipo (o grupo de equipos) que comparte(n) recursos con diferentes sistemas operativos.
La idea original de la virtualización se originó en los años ’60, cuando los equipos de cómputo eran grandes mainframes con costos sumamente altos. Para poder justificar el costo elevado de los equipos era necesario poder emplear al máximo los recursos. Con esta idea en mente aparecen los primeros equipos particionados y años más tarde virtualizados, donde se podían correr múltiples sistemas operativos dentro de un mismo equipo.
Esas características fueron poco a poco permeando hasta llegar a los equipos basados en Unix, lo cual permitió correr múltiples instancias del sistema operativo en un mismo equipo. Fueron años más tarde que aparecieron productos que permitían virtualizar equipos basados en tecnología x86, al punto que podemos correr Windows dentro de una laptop de Apple, intercambiando archivos entre la máquina física y la maquina virtual de forma transparente.
En los últimos años se han incorporado diferentes recursos técnicos en los procesadores para permitir una mayor integración con los productos de virtualización. Hoy ya es posible mover una máquina virtual desde un equipo a otro sin interrumpir la operación, y de forma transparente para los usuarios.
Pero una de las novedades más grandes vienen con el apoyo de las nuevas tecnologías aportadas por Intel y que permiten escalar de forma casi lineal, así como la incorporación de funciones sofisticadas dentro del núcleo de Linux. Todo esto combinado con nuevas estrategias de mercado como el cloud computing, lo cual ha generado el desarrollo de nuevos productos más flexibles.
Pero qué es el Cloud Computing?
La idea de una nube la hemos visto desde hace años cuando nos quieren representar en unos bellos slides la idea de Internet y la relatividad de las distancias y ubicaciones. El cloud computing hace uso de esa idea que nos han forjado durante años, pero aplicado a la infraestructura de cómputo. Un término muy usado es Infraestructura como Servicio o IaaS (por sus siglas en inglés).
El Cloud Computing consiste en una serie de tecnologías combinadas que convierten a la infraestructura en una caja negra, y nos permite rentar equipos, en el caso de una “nube pública” (aquella que es ofrecida a través de Internet) sin tener que movernos de nuestros escritorios.
Como ejemplo, si queremos contar por 15 días con un servidor que corra Linux y DB2 para fines de desarrollo, podemos rentarlo fácilmente desde el portal llamado IBM SmartCloud Enterprise. Dependiendo del recurso que necesitemos podemos rentar desde 1 mes, 1 día o 1 hora de un servidor con todo lo necesario para correr nuestras aplicaciones. Obviamente, dependerá de que estas no requieran del acceso físico a los equipos, o será prácticamente imposible de usar.
También existe otro concepto muy interesante llamado Cloud Privada. Con una Cloud Privada podemos crear un pool de recursos en nuestro Centro de Datos y brindar servicios de forma automatizada. Esto es de gran utilidad en empresas de gran tamaño, donde el costo de las licencias y el equipamiento se ve opacado por el esfuerzo necesario y la inversión requerida para operarlo.
Imaginemos el siguiente caso: Un programador le lleva una interesante idea de proyecto a su gerente del área para contar con un sistema web que de seguimiento a camiones mediante el uso de celulares. Este debe elevar el proyecto a su director, serán necesarias múltiples juntas para tomar una decisión, y una vez decidido pasarán el proyecto a compras.
En compras llamarán a su pool de proveedores para pedir cotizaciones, se comenzará a negociar el mejor precio, se colocará la orden y se entregará en un promedio de 6 semanas.
Una vez entregado, el equipo debe ser instalado, configurado, y recién será posible hacer uso de él.
Estamos hablando de un proceso que en su totalidad puede llevar de 3 a 6 meses desde que se solicita hacer la prueba de concepto hasta que se cuenta con el equipo listo para su uso.
En una nube pública o privada podemos reducir ese tiempo a unas cuantas horas, a lo sumo un par de días, puesto que los recursos ya existen y hay software especializado que se encarga de "aprovisionar" los recursos, instalar el sistema operativo con el software necesario, configurar la red y crear los usuarios para conectarse.
En estos momentos estamos viviendo una realidad donde el volumen de información y el tamaño de las infraestructuras comienzan a afectar el poder contar con un servicio de calidad. El haber pasado de grandes equipos que concentraban el poder de cómputo a múltiples equipos de diferentes proveedores con distintas tecnologías nos hacen ver como atrapados en una selva de servidores, software, tecnologías y redes cada vez más compleja, y de la cual sabemos que no hay salida, sino que debemos controlar para no perecer en la operación diaria.
Lo mismo ocurre con la virtualización. Las soluciones que permiten virtualizar no siempre son económicas. Muchas de ellas tienen precios súmamente elevados, pero el beneficio muchas veces lo justifica.
Veamos como ejemplo la virtualización de escritorios. Una serie de equipos corriendo un software con un costo bastante elevado para reemplazar a PCs que han sido amortizadas en el tiempo y que sólo reducirán el costo de administración, pero no de adquisición.
Entonces, conviene o no virtualizar?
Cual es mi brake-even que me permitirá comenzar a ahorrar costos?
Realmente la virtualización me aporta algo?
No existe una respuesta única a eso. La pregunta es: necesitamos reducir costos de operación o de adquisición?
Como regla del pulgar podríamos casi afirmar que:
1) si contamos con más de 30 o 40 servidores la virtualización es una excelente alternativa para reducir costos de operación, mejorar los tiempos de entrega de proyectos, consolidar los respaldos y reducir consumo eléctrico
2) contando con más de 100 servidores podemos casi afirmar que la virtualización es una necesidad y una cloud privada para crear un portal de auto-gestión de recursos es una excelente idea
3) con más de 200 servidores una cloud privada es como oro sólido
4) Si pensamos reducir costos de escritorios usando escritorios virtuales (VDI) , no pensemos en un escenario de menos de 200 o 300 puestos de trabajo, o no habrá una amortización suficiente del costo de arranque
Diego E. KESSELMAN
Qué es la virtualización?
La virtualización, desde un punto de vista de IT, es un recurso tecnológico que permite simular el contar con múltiples equipos cuando en realidad tenemos un equipo (o grupo de equipos) que comparte(n) recursos con diferentes sistemas operativos.
La idea original de la virtualización se originó en los años ’60, cuando los equipos de cómputo eran grandes mainframes con costos sumamente altos. Para poder justificar el costo elevado de los equipos era necesario poder emplear al máximo los recursos. Con esta idea en mente aparecen los primeros equipos particionados y años más tarde virtualizados, donde se podían correr múltiples sistemas operativos dentro de un mismo equipo.
Esas características fueron poco a poco permeando hasta llegar a los equipos basados en Unix, lo cual permitió correr múltiples instancias del sistema operativo en un mismo equipo. Fueron años más tarde que aparecieron productos que permitían virtualizar equipos basados en tecnología x86, al punto que podemos correr Windows dentro de una laptop de Apple, intercambiando archivos entre la máquina física y la maquina virtual de forma transparente.
En los últimos años se han incorporado diferentes recursos técnicos en los procesadores para permitir una mayor integración con los productos de virtualización. Hoy ya es posible mover una máquina virtual desde un equipo a otro sin interrumpir la operación, y de forma transparente para los usuarios.
Pero una de las novedades más grandes vienen con el apoyo de las nuevas tecnologías aportadas por Intel y que permiten escalar de forma casi lineal, así como la incorporación de funciones sofisticadas dentro del núcleo de Linux. Todo esto combinado con nuevas estrategias de mercado como el cloud computing, lo cual ha generado el desarrollo de nuevos productos más flexibles.
Pero qué es el Cloud Computing?
La idea de una nube la hemos visto desde hace años cuando nos quieren representar en unos bellos slides la idea de Internet y la relatividad de las distancias y ubicaciones. El cloud computing hace uso de esa idea que nos han forjado durante años, pero aplicado a la infraestructura de cómputo. Un término muy usado es Infraestructura como Servicio o IaaS (por sus siglas en inglés).
El Cloud Computing consiste en una serie de tecnologías combinadas que convierten a la infraestructura en una caja negra, y nos permite rentar equipos, en el caso de una “nube pública” (aquella que es ofrecida a través de Internet) sin tener que movernos de nuestros escritorios.
Como ejemplo, si queremos contar por 15 días con un servidor que corra Linux y DB2 para fines de desarrollo, podemos rentarlo fácilmente desde el portal llamado IBM SmartCloud Enterprise. Dependiendo del recurso que necesitemos podemos rentar desde 1 mes, 1 día o 1 hora de un servidor con todo lo necesario para correr nuestras aplicaciones. Obviamente, dependerá de que estas no requieran del acceso físico a los equipos, o será prácticamente imposible de usar.
También existe otro concepto muy interesante llamado Cloud Privada. Con una Cloud Privada podemos crear un pool de recursos en nuestro Centro de Datos y brindar servicios de forma automatizada. Esto es de gran utilidad en empresas de gran tamaño, donde el costo de las licencias y el equipamiento se ve opacado por el esfuerzo necesario y la inversión requerida para operarlo.
Imaginemos el siguiente caso: Un programador le lleva una interesante idea de proyecto a su gerente del área para contar con un sistema web que de seguimiento a camiones mediante el uso de celulares. Este debe elevar el proyecto a su director, serán necesarias múltiples juntas para tomar una decisión, y una vez decidido pasarán el proyecto a compras.
En compras llamarán a su pool de proveedores para pedir cotizaciones, se comenzará a negociar el mejor precio, se colocará la orden y se entregará en un promedio de 6 semanas.
Una vez entregado, el equipo debe ser instalado, configurado, y recién será posible hacer uso de él.
Estamos hablando de un proceso que en su totalidad puede llevar de 3 a 6 meses desde que se solicita hacer la prueba de concepto hasta que se cuenta con el equipo listo para su uso.
En una nube pública o privada podemos reducir ese tiempo a unas cuantas horas, a lo sumo un par de días, puesto que los recursos ya existen y hay software especializado que se encarga de "aprovisionar" los recursos, instalar el sistema operativo con el software necesario, configurar la red y crear los usuarios para conectarse.
En estos momentos estamos viviendo una realidad donde el volumen de información y el tamaño de las infraestructuras comienzan a afectar el poder contar con un servicio de calidad. El haber pasado de grandes equipos que concentraban el poder de cómputo a múltiples equipos de diferentes proveedores con distintas tecnologías nos hacen ver como atrapados en una selva de servidores, software, tecnologías y redes cada vez más compleja, y de la cual sabemos que no hay salida, sino que debemos controlar para no perecer en la operación diaria.
Lo mismo ocurre con la virtualización. Las soluciones que permiten virtualizar no siempre son económicas. Muchas de ellas tienen precios súmamente elevados, pero el beneficio muchas veces lo justifica.
Veamos como ejemplo la virtualización de escritorios. Una serie de equipos corriendo un software con un costo bastante elevado para reemplazar a PCs que han sido amortizadas en el tiempo y que sólo reducirán el costo de administración, pero no de adquisición.
Entonces, conviene o no virtualizar?
Cual es mi brake-even que me permitirá comenzar a ahorrar costos?
Realmente la virtualización me aporta algo?
No existe una respuesta única a eso. La pregunta es: necesitamos reducir costos de operación o de adquisición?
Como regla del pulgar podríamos casi afirmar que:
1) si contamos con más de 30 o 40 servidores la virtualización es una excelente alternativa para reducir costos de operación, mejorar los tiempos de entrega de proyectos, consolidar los respaldos y reducir consumo eléctrico
2) contando con más de 100 servidores podemos casi afirmar que la virtualización es una necesidad y una cloud privada para crear un portal de auto-gestión de recursos es una excelente idea
3) con más de 200 servidores una cloud privada es como oro sólido
4) Si pensamos reducir costos de escritorios usando escritorios virtuales (VDI) , no pensemos en un escenario de menos de 200 o 300 puestos de trabajo, o no habrá una amortización suficiente del costo de arranque
Diego E. KESSELMAN